domingo, 19 de junio de 2011

prenez soin de vous






Cuando vi este autorretrato de Sophie Calle, me interesó buscar lo que hacía.
Conforme iba leyendo, me dí cuenta de que esa foto era la síntesis perfecta de su obsesión: mirar y ser mirada.

En su forma de actuar, había algo de mí, ese impulso de recoger cosas intrascendentes que pone el azar en el camino y dedicarles un montón de energía, buscar afanosamente un sentido a algo que se sabe de antemano que no lo tiene. La diferencia es que ella lo convirtió en su profesión y en mi caso, no deja de ser una pérdida de tiempo, un agarrarse a lo absolutamente improductivo.

Pero no le basta con mirar, necesita meterse en la intimidad de las personas y que las personas se metan en la suya propia y lo lleva al extremo.


Sophie Calle, recibió vía e-mail, una carta de ruptura de su pareja que terminaba diciendo: "prenez soin de vous" (cuídate, pero que en francés suena mucho más frío y despiadado). No sabiendo qué responder y sintiéndose como si ella no fuera la destinataria de la carta, la envió a 107 mujeres y les pidió que la interpretaran según sus oficios y ocupaciones, había cantantes, contables, actrices, bailarinas, criminólogas, periodistas, astrólogas, poetas, matemáticas, dramaturgas, traductoras, payasas y más.

Con todo el material fotográfico, grabado y escrito, hizo un libro "Prenez soin de vous" y más adelante una exposición. Y así consiguió salir del agujero.



Para otro de sus trabajos, buscó a gente desconocida para que ininterrumpidamente y por turnos, durmieran en su cama, durante ocho días. Les observó y les tomó fotos mientras dormían.

Cuando volvió a París después de estar siete años en el extranjero, se dedicó a seguir a gente por la calle y ella misma cuenta, que siguió a un tipo hasta Venecia. Invirtiendo los papeles, cuando le pidieron que trabajara sobre un autorretrato, le dijo a su madre que contratara a un detective para que siguiera todos sus pasos y la fotografiara.


Otra vez, se encontró una agenda y se le ocurrió fotocopiarla y devolverla anónimamente, quería conocer al dueño de la agenda a través de sus contactos, que ellos le contaran todo de él.


Paul Auster convirtió a Sophie Calle en un personaje de su novela y en eso estoy, leyendo Leviatán.





-

28 comentarios:

  1. Bueno si en eso estas, prends bien soin de toi... ;-)
    Bises, Claudia.

    ResponderEliminar
  2. Para mí Paul Auster es el mejor escritor actual.
    Es excepcionalmente bueno.

    Besos.

    ResponderEliminar
  3. Gran fotógrafa esta Sophie Calle.
    Tendré que leer ese libro de Auster que la trae como personaje.

    Saludos

    ResponderEliminar
  4. Sabías que yo estoy enamorada de Paul, no?

    Un beso o 2 #

    Una vez más coincido con Toro #

    ResponderEliminar
  5. Yo, como fan de la privacidad, me veo aterrado por esto. Y tentado, a la vez.

    ResponderEliminar
  6. Imagino que en mayor o menor medida todos deseamos mirar y ser mirados. Me gustó la entrada de Sophie Calle y otras que he curioseado :) Te sigo para seguir mirando...

    ResponderEliminar
  7. Claudia, conocer lo verdadero es algo así no? como quedarse espiando...
    me encanta

    ResponderEliminar
  8. Es una historia muy interesante, aunque roza la locura, si no traspasa la línea, y también la del acoso, ¿no?

    Besos

    ResponderEliminar
  9. No coincidiendo en parte con esto de que tu no le extraes beneficios a esto de aprovechar la vida cotidiana, (ya vez, tiene un blog realmente bello) lo de Sofhie, hay que reconocerlo es altamente creativo.

    Bueno, ya nos dirás cuando termines la novela.

    Cuidate. (pero cuidate bien) :)

    Soy Carlos, de Apenas penas.

    ResponderEliminar
  10. En "Todos los nombres", de Saramago, el protagonista (José, el único al que se llama por su nombre) se obsesiona con una mujer de la que sólo conoce su ficha del Registro Civil. Comienza a investigar, a seguir pistas, con la intención de encontrar a una mujer que ha sido capaz de enamorarlo por su nombre, por su rastro registral. La clave es "mirar". Quien sabe mirar, ya está en ventaja: podrá encontrar filones de belleza que no se "ven".

    Por cierto: tu blog es eso: una sucesión de "miradas". Miradas que me encantan.

    ResponderEliminar
  11. Gracias por el dato, la voy a leer :D

    ResponderEliminar
  12. Me convenciste. Voy por ella. Ciertamente, Auster ya me había convencido hace un tiempo.

    ResponderEliminar
  13. Impresionante, interesante y productiva, la forma de mirar la vida de Sophie Calle. Aprender a conocerse a una misma conociendo a los demás hasta la última huella, me parece un método más que inteligente.

    Paul Auster me fascinó desde que leí "El Palacio de la Luna". En sus novelas concede gran importancia a esa "casualidad no tan casual", por tanto, no me extraña ni un ápice que conviertiera en personaje literario a Sophie Calle y su mirada del mundo.

    Interesantísima entrada, Claudia. Gracias.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  14. Amiga con la emoción que le pones a las cosas no estás perdiendo el tiempo, puede que para ti no tenga mucho sentido, pero no es una perdida de tiempo...
    el día que vi el regalazo que nos hicistes por aquí, con las imágenes que concordaban con nuestros blogs, con nuestros espiritus, regalo sin publicidad, ni alardeo, tendido como todo buen presente, volví a creer que los blogs es un espacio extraordinario de compartir cosas desde lo humano con desconocidos que ya no lo son.

    Me quedo con la curiosidad de leer máss sobre esta personaja, me recuerda a Amelí...

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  15. Corajuda. Hay que animarse a sumergirse en las vidas ajenas y dejar que revisen todos nuestros rincones y miserias. Yo no me atrevería.

    ResponderEliminar
  16. leí Leviatán el año pasado, ya decía yo que me sonaba.

    biquiños y que lo disfrutes
    Aldabra,

    ResponderEliminar
  17. Muy interesante, he leído un montón de Paul Auster pero creo que Leviatán se me ha escapado, pero por lo que cuentas de Sophie es una persona totalmente austeriana.
    Un saludo
    PD.Probablemente tengas razón en que es algo absolutamente improductivo, pero dudo mucho que sea una pérdida de tiempo. En todo caso ¿ que no es una pérdida de tiempo?.

    ResponderEliminar
  18. Muy interesante lo que cuentas, leí hace tiempo Leviatán y me gustó bastante.

    Besos.

    ResponderEliminar
  19. Fijate que una frase enviada (supongo) para dejarte hundida te abre todo un camino... Me ha encantado esta historia

    ResponderEliminar
  20. PARECE OBSESIVO lo que esta mujer hace...la mejor forma de entrar en la intimidad de las personas, es dando la tuya...interesante lo que se puede descubrir

    ResponderEliminar
  21. más que interesante tu entrada que he disfrutado mucho.
    Inteligencia y un escritor maravilloso como Paul Auster hacen de esta entrada un buen regalo. Gracias.
    Un beso, Claudia

    ResponderEliminar
  22. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  23. interesantísimo. en una clase, no hace mucho, vi una de sus fotos con un vagabundo en su cama. quedé impresionado. e intrigado. tendré que leer a paul.

    vale saber más.

    ResponderEliminar
  24. Muy curioso, lo buscaré y te cuento.....

    ResponderEliminar
  25. Por encontronazos del ramo(y me dejo cuidar/querer)paso por este blog.

    Una amiga mía decía: "cuidate, y me cuidarás". Algunas lecturas tiene

    En cuanto al acto voyeurista de mirarse y remirarse a uno mismo, o la hostia ya sería seguirse a uno mismo en su viaje a Venecia (pagando encima por dos), qué aburrido. Parece más divertido autorretrarse en ese retratar a los que nos encontramos, con o sin nazos.

    Por cierto, mi luna habla, pero yo no la escucho

    Merci

    ResponderEliminar