miércoles, 8 de junio de 2011

intangibles

(Dorothea Lange)


No puso ninguna regla ni condición pensando que lo que saliera le serviría,  pero las normas empezaron a imponerse intangibles y caprichosas, como si los intentos de hacer algo fácil, se volvieran del revés para no dejarle improvisar, como si la misma falta de normas estrangulara.


No quería preguntar por si parecía que le interrogaba, ni podía sentirse tan mal, por si se notaba que le importaba demasiado. No habían puesto un contenedor donde depositar la tristeza.

Dejó crecer el misterio, ese misterio que atrae y estimula, pero creció desmesurado, como si alguien lo abonara en secreto y lo injertara con la obsesión.

Toda aquella arena fina y cálida bajo sus pies, se empezó a escapar con cada ráfaga, no había forma de retenerla y presentía que estaba formando una duna en algún otro desierto.


Esa intensidad de sentimientos, dolía con tanta indefinición,  pero de vez en cuando la echa de menos.

35 comentarios:

  1. uy, el final me parece extremo
    me gusta mucho!

    ResponderEliminar
  2. Echamos de menos sentir dolor...
    No sé yo si estamos muy centrados.

    Besos.

    ResponderEliminar
  3. Las normas siempre acaban imponiéndose, inevitablemente. Me pregunto si el dolor también es inevitable..
    Buen texto, Claudia.

    ResponderEliminar
  4. ...formar una duna en otro desierto...Triste pero precioso.
    Soy Frida, blogger no me deja publicar desde mi blog..Queria decirtelo

    ResponderEliminar
  5. La cruel tiranía del "no hay reglas", al final parece que hay más libertad cuando se estipulan estatutos 8bueno, cuando se acuerdan, no cuando se imponen). Saludos.

    ResponderEliminar
  6. Al fin y al cabo una anarquía es antinatural. Físicamente hablando.

    ResponderEliminar
  7. Toro: el dolor no es precisamente lo que echo de menos.

    ResponderEliminar
  8. Hombre de Alabama: casi lo titulo anarquía. Sonaba demasiado divertido.

    ResponderEliminar
  9. un texto oscuro para quien (como yo) no sabe de qué va.

    intuyo que de amor... de desamor, mejor dicho... ese desamor que arrasa todo.

    biquiños,
    Aldabra

    ResponderEliminar
  10. Aldabra: ¿Es oscuro? ¿de verdad? Me parecía tan transparente que me daba reparo.

    ResponderEliminar
  11. Pues a mí me suena..."dejó crecer el misterio que creció desmesurado....como si alguien lo injertara con una obsesión"....dolía pero lo echaba de menos...me suena...me suena....creo que me siento así...alguien lo alimenta....por si notaba que le importaba demasiado..... yo creo que estamos más o menos igual. Lo sientes pero no puedes demostrarlo, te obsesionas pero no se te puede notar, lo alimenta y crece pero lo envuelve en misterio....la intesidad de sentimientos duele, mucho, pero no puedes estar sin ella...¡jopé cómo lo clavas!

    ResponderEliminar
  12. Sentimientos que no se pueden definir existen tantos, que el dolor se transforma en esa arena que se escurre entre los dedos. Malditas normas... que imponen un pensamiento sutíl y ágil que sólo quería traviesamente volar.
    Besos, Claudia.

    ResponderEliminar
  13. He ido a la ferretería de la esquina para comprar un contenedor donde depositar tristeza. Me han recomendado que la tapa está siempre abierta: sólo con el aire se recicla. He arrojado ya algunas cosas, dos o tres. Llevo toda la mañana mirando el contenedor, y estoy empezando a sentirme mejor: la habitación entera se ha convertido en un depósito de alegría.

    ResponderEliminar
  14. Fantastico,me encanta. Por cierto, estoy teniendo un aumento desmesurado de visitas en el blog, te pasa a ti?

    ResponderEliminar
  15. LARA: A mí no me pasa. Yo los mismos de siempre, los que comentan, los que no comentan y los que llegan buscando cosas rarísimas. El aumento de visistas debe ser mérito tuyo.

    ResponderEliminar
  16. Qué buena idea la del contenedor para echar la tristeza, te recomiendo que la patentes, te harías de oro, jeje.

    Besos

    ResponderEliminar
  17. Ohhh, lleno de melancolía, pero me transmitió mucha calma.

    Besos.

    ResponderEliminar
  18. GRacias Claudia, eres un encanto pero ya he confirmado que es un problema generalizado a algunos blogs.

    ResponderEliminar
  19. Suena a que se volverá a dar los mismos pasos, puede que con otra persona, pero cuando hay un bloqueo emocional no resuelto, un sentía esto pero no lo dije, un dejar marchar, todo se enquista y volverá con este u otro espejo. hablo desde mi experiencia personal...

    Un abrazo, y mira que sólo quería comentar que es colección de la America profunda es demoledora, con una textera insuperable y una visión de la nada increible, incluso nada con gente!

    ResponderEliminar
  20. Me ha encantado el encuentro con Dorothea (¿fuego dorado?
    me llevo un poco de esa arena, me lavo la cara con ella, empieza a brillarme la nariz.

    gracias Claudia

    ResponderEliminar
  21. te he dejado un comentario en el enlace de las orquídeas, por si no ves los comentarios de posts antiguos.

    biquiños,
    Aldabra

    ResponderEliminar
  22. Triste, oscuro? Quizás. Son los textos que más arte respiran y que más me gustan.

    Cruzando los dedos para que salga mi comentario...

    Un beso o 2 #

    ResponderEliminar
  23. Se te hace una pelota de nervios a la altura del estómago, la impotencia en la garganta.

    ResponderEliminar
  24. Me llevo de tu blog, el misterio, intensidad, melancolía...y en el instante de dejarte un abrazo, me envuelvo de calma.
    Me ha gustado!

    ResponderEliminar
  25. Desangelado el misterio, sólo quedan las huellas en la arena, al gobierno de un viento intransigente.

    Todo final nos despuebla.

    (soy Carlos, de Apenas penas)

    ResponderEliminar
  26. Vengo volando desde Copenhague y me encuentro con tu excelente relato.
    Ese contendor es capaz de hacer milagros.
    A pesar de la oscuridad de tu escrito, al final del tunel hay una vela que arde para todos.

    Saludos desde la tierra de la Sirenita que llora por la pérdida de su principe,

    Ian.

    ResponderEliminar
  27. La falta de algunas normas, terminan estrangulándoete.
    Increíblemente descriptas cada sensación.

    Abrazo

    MAGAH

    ResponderEliminar
  28. Sensaciones, ponle el plural. Gracias.

    ResponderEliminar
  29. Los desiertos viajan a la velocidad del desencanto.

    Un gran saludo.

    ResponderEliminar
  30. Me gusta mucho este texto con imágenes que definen muy bien los sentimientos, como la arena fina bajo los pies.
    Besos.

    ResponderEliminar
  31. Impresionante texto, impresionante imagen.
    Hace mucho que me he apasionado por la fotografía y mucho que conozco a este crack de la fotografía...todo, absolutamente todo lo que he visto de ella, me ha llegado al alma.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  32. Me ha encantado! :) Te seguiré en lo sucesivo!

    ResponderEliminar
  33. Lo importante, yo creo, es vivir o sentir con intensidad, a lo mejor no importa tanto qué

    ResponderEliminar
  34. Sin dudas lo intangible nos gobierna y tiene esa movilidad sutil de la arena que va de duna en duna....No sentimos hasta que un dia advertimos que tenemos una duna de tristezas (efecto acumulativo de lo intangible?)

    mi beso

    ResponderEliminar